Los Estados nacionales toman cada vez más preponderancia en relación a los presupuestos que atañen al rubro Salud. En el reciente IQVIA World Review celebrado la semana pasada en Buenos Aires se pasó revista a la incidencia que tiene en cada país de la región, el gasto que surge desde las arcas públicas.

En la Argentina, resulta un tema de permanente debate, el volumen de fondos públicos que se destinan a diferentes necesidades de asistencialismo y cobertura en materia de Salud. Y en relación con estos renglones, el tema de los presupuestos derivados al pago de medicamentos y tecnologías médicas cobra creciente vigor.

Sin embargo, y según lo expuesto en el IQVIA World Review celebrado la semana pasada en Buenos Aires, se reflejó que Argentina está en línea con lo que sucede en el resto de la región. Allí se explicó que el gasto de salud en LATAM ha crecido significativamente entre 2010 y 2019. María Laura Devoto, senior director para Andes & South of LATAM en IQVIA explicó que en la última década se observa que hay un avance en el gasto en salud en la mayoría de los países de la región, tanto como porcentaje del PBI como en gasto per capita. Ver artículo IQVIA: informe del World Review, Argentina

En Argentina, por caso, el Estado aporta el 62% del gasto, mientras que un 28% se origina en fuentes privadas de las denominadas «gastos de bolsillo» y el 10% restante en otros expendios privados. A la Argentina, la supera sin embargo Perú, donde el Estado contribuye con el 63% del gasto, le sigue Panamá con el 66%; Uruguay con el 67%; Colombia con el 72% y Costa Rica con el 73%.

En términos de gasto per capita, medido en paridad de poder de compra (PPC) y combinando todas las fuentes de financiamiento, tanto públicas como privadas, el ranking es encabezado por Panamá con u$s 2.491, seguido por Chile y Uruguay con u$s 2.424 y u$s 2.310, respectivamente. En Argentina el gasto per capita está marcado en u$s 2199.

En otra parte de su exposición, Devoto destacó que en la mayoría de los países hay una tendencia hacia mayores controles de precios. En este sentido pasó revista a los cambios esperados en la región para 2022-23. En el caso de Argentina, citó que podrían darse algunas iniciativas relativas al segmento del ultra alto costo. Y aunque se definió que en Argentina «no hay controles de precios«, se mencionó que el «precio PAMI», de alguna forma se convierte en un factor de control indirecto.

Respecto del acceso en el mercado privado, se subrayó que «empeoró» en el período 2020-2021, lo que resultó en demoras en el acceso a tratamientos de alto costo, a la vez que surgió la introducción de los copagos.

IQVIA: informe del World Review, Argentina

 

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Periodista especializado en finanzas y mercado de capitales.

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