Unilever tuvo una mega oferta de compra, pero desde la compañía se negaron rotundamente. También fue un alerta para el gobierno británico.

El fallido intento de Kraft por adquirir a Unilever es otro caso de un mega deal que no llega a buen puerto.

La norteamericana de alimentos había ofrecido u$s 143 mil millones para hacerse de la angloholandesa, lo que significaría más del doble de lo que pagó Bayer por Monsanto, operación que se había constituido como la más importante del año 2016. Ver artículo.

La caída de este acuerdo se suma a una reciente serie de fracasos que muestra como las grandes compañías buscan mega fusiones que a veces resultan muy audaces. Ver artículo.

El intento más emblemático fue tal vez el que tuvo como protagonista a Pfizer cuando dos años atrás quiso adquirir a la irlandesa Allergan. Aunque en ese momento los palos en la rueda llegaron por razones diferentes.

Pfizer había tenido que recular luego de que el Departamento del Tesoro de Estados Unidos cambiara las normativas para las transacciones bautizadas como “operaciones inversas”, en las que una compañía adquiere otra más pequeña para “utilizar” su domicilio fiscal. Ver artículo.

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