Wall Street siguió navegando esta semana muy cerca de sus máximos históricos. En tanto, los accionistas y analistas de inversión del sector de farma debieron principalmente salir a recalcular y proyectar nuevos escenarios luego de que el presidente estadounidense Donald Trump anunciara un arancel del 100% para importaciones de medicamentos.
El tema de la semana sin lugar a dudas en los mercados financieros fue la nueva ola de aranceles que anunció el presidente norteamericano, Donald Trump, entre ellos un impuesto del 100% a las importaciones de medicamentos de marca o patentados a partir del 1° de octubre, a menos que una empresa esté construyendo una fábrica en Estados Unidos.
La noticia desencadenó el jueves una ola de ventas masivas de acciones farmacéuticas como Eli Lily, Pfizer y AstraZeneca. En un efecto dominó, importantes ETFs farmacéuticos como SPDR S&P Pharmaceuticals ETF, XPH, First Trust NASDAQ Pharmaceuticals ETF, FTXH, iShares U.S. Pharmaceuticals ETF, IHE, y VanEck Pharmaceutical ETF, PPH, también sufrieron pérdidas considerables.
Sin embargo, a largo plazo, esta imposición arancelaria podría ser potencialmente beneficiosa, aunque conlleva complejidad. Por ejemplo, muchas compañías farmacéuticas como Eli Lilly, Johnson & Johnson y Merck ya han anunciado miles de millones de dólares en inversiones para nuevas instalaciones en Estados Unidos, lo que idealmente debería impulsar la fabricación de medicamentos en el país.
Quienes también sintieron el rigor de la nueva política arancelaria anunciada por el presidente Trump, fueron las acciones de compañías farmacéuticas indias, que integran uno de los sectores más dinámicos de la nación asiática. Estados Unidos es el mayor mercado de exportaciones de este rubro de la India, representando más de un tercio del volumen total, principalmente de medicamentos genéricos más económicos.
Uno de los movimientos más destacados de la semana en el sector healthcare fue el protagonizado por el fabricante de envases primarios para medicamentos y dispositivos de administración de fármacos Gerresheimer, cuyas acciones se desplomaron hasta un 38% el miércoles. Esto después de que el regulador financiero alemán BaFin anunciara que estaba investigando presuntas infracciones de las normas contables, especialmente por haber reconocido ingresos por algunos contratos con clientes antes de que se materializaran.
Por otro lado, las acciones de la norteamericana Kenvue, la empresa farmacéutica que comercializa Tylenol, se subieron a una montaña rusa de fuertes subas y bajas. Esto después de que el presidente Trump, así como otros altos funcionarios de salud de ese país afirmaron que el paracetamol –acetaminofeno-, está asociado al desarrollo de autismo en periodos prenatales. Las declaraciones fueron desautorizadas desde varios frentes de la comunidad médica y científica, lo que llevó cierta tranquilidad a los inversores.
A mitad de semana, un tribunal de París ordenó al laboratorio local Sanofi y a su filial Winthrop a pagar €150,7 millones en concepto de daños y perjuicios al Fondo Nacional de Seguro de Salud, CNAM, de Francia por prácticas anticompetitivas relacionadas con su medicamento anticoagulante Plavix. En 2013, la multi que dirige el inglés Paul Hudson ya había recibido una multa de €40,6 millones por actuar contra competidores genéricos de Plavix entre 2009 y 2010.
