Más compañías abandonan su operación en la Argentina, en medio de una crisis económica que se vio acrecentada por la pandemia. La distribuidora de fragancias brasileña Bright Star se fue del país y dejó su portafolio en manos de dos históricos del sector: los nacionales Diffupar y Greta.
El negocio de las fragancias y de la cosmética de lujo se vio fuertemente impactado desde la nueva era del COVID-19 en todo el mundo.
Esto, por supuesto, tuvo su pertinente correlato en la Argentina, donde el mercado acusó recibo y obligó a las empresas del sector a repensar sus respectivas estrategias en el país. De hecho y después de un 2020 súper duro para el comercio, durante este mes de mayo, los shoppings -el espacio en el que se concentran este tipo de transacciones- permanecerán cerrados por lo menos hasta el domingo 30 de mayo. Ver artículo
En otro orden, Pharmabiz pudo saber que el año pasado la distribuidora de perfumes brasileña Bright Star abandonó su operación en el país. Algunas de las marcas que estaban bajo su paraguas en el mercado local migraron al portafolio de la local Diffupar, propiedad de la familia Bordoni -dueña también de la cadena Rouge– y comandada en la Argentina por su CEO Diego Alier.
Las líneas que cambiaron de manos son, por caso, Issey Miyake; Dolce & Gabbana; y Narciso Rodríguez, las que forman parte del portafolio de la división Beauté Prestige International y que están a nivel global bajo la japonesa Shiseido. En la Argentina, Bright Star estaba encabezada por Francisco Brizuela, CEO para esta plaza, Paraguay, Brasil y Chile. Ver Press Release Shiseido
En paralelo, la distribuidora Greta comandada por Renato Saphir tomó las marcas de cuidado capilar Joico y Alterna. Las mismas son propiedad de la alemana Henkel y también eran distribuidas por los brasileños de Bright Star.
