El Procedimiento de Mediación Prejudicial en Materia de Salud, PROMESA, sigue sumando voluntades. Ahora el que se adhirió fue el PAMI, la mayor obra social del continente. El procedimiento propone una vía optativa, rápida y menos costosa de resolver conflictos vinculados al acceso a prestaciones de salud.
A través de la Resolución 1861 publicada hoy en el Boletín Oficial, la Superintendencia de Servicios de Salud registró al Instituto Nacional de Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados –INSSJP- en el Procedimiento de Mediación Prejudicial en Materia de Salud -PROMESA-. Ver Boletín Oficial
Se trata de una iniciativa articulada entre los Ministerios de Salud, Justicia y la Superintendencia de Servicios de Salud que propone una alternativa eficaz para resolver conflictos en salud y rige desde el 2 de septiembre pasado. Según detalla el gobierno, es una vía optativa, rápida y menos costosa de resolver conflictos vinculados al acceso a prestaciones de salud. Ver Gobierno reglamenta PROMESA
Con el objetivo de ampliar el alcance y la efectividad de la medida, la normativa incluyó la posibilidad de que aquellas entidades no comprendidas en las Leyes 23.660, 23.661, 26.682 puedan adherir de manera voluntaria al procedimiento. Esta adhesión implica la sujeción plena al marco jurídico establecido por el Decreto N°379/2025, que crea PROMESA.
Esta adhesión se da en el marco del reordenamiento del sistema que impulsa el Gobierno Nacional a través del Ministerio de Salud y de Justicia de la Nación, con el objetivo de transparentar y agilizar el sistema. Según la SSS, PROMESA representa un avance concreto hacia un sistema de salud más eficiente y equitativo.
La semana pasada, la SSS participó, junto al equipo jurídico del Ministerio de Salud, de la primera mediación extrajudicial a través de PROMESA. En apenas cuatro días hábiles, la parte solicitante y el agente del seguro en cuestión alcanzaron un acuerdo. Ver comunicado de prensa
Esta primera mediación fue solicitada por una persona que pidió la reincorporación de su hijo a una obra social para que pueda continuar con el tratamiento que realizaba. Sin embargo, no se menciona cuál es la obra social en conflicto. El acuerdo alcanzado reconoció las preexistencias médicas y los antecedentes clínicos del menor, y además, incluyó las autorizaciones necesarias para que continúe con la asistencia médica y las siguientes prestaciones: apoyo a la integración escolar, terapia psicológica y terapia ocupacional.
. 
