La versión latina de la vacuna de AZ sigue llegando a la Argentina mediante envíos de poca envergadura. Al momento, el país recibió menos del 30% de las unidades acordadas con el laboratorio británico, en el marco del proyecto Slim.

Esta mañana, la Argentina recibió la quinta tanda de la versión latina de la vacuna anti-COVID-19 de AstraZeneca. Y aunque en paralelo hay una gran afluencia de vacunas asiáticas, el contrato con el laboratorio británico sigue mostrando grietas.

A pesar de que ya hubo dos envíos en mayo y el de hoy es el tercero de junio, la Argentina recibió recién el 26,7% de todo lo pautado, lo que tiene como norte 22 millones de dosis.

El cargamento que desembarcó esta mañana trajo 1.139.000 dosis desde Estados Unidos. El lunes anterior, se habían recepcionado 934.200 unidades y dos días antes, 811.000. La partida más grande al momento llegó el último día de mayo. Esa vez, arribaron 2.148.600 vacunas y el 24 de mayo, las dosis fueron 843.600. Ver Comunicado.

El contrato que le da marco a esta secuencia de envíos fue firmado en noviembre del año pasado. Y dos meses antes, la decisión había sido anunciada mediante cadena nacional por el propio presidente de la Nación, Alberto Fernández. La gran noticia era que Argentina iba a fabricar sus propias vacunas. Ver artículo «AZ firmó su acuerdo por vacuna, Argentina».

La elaboración del principio activo tuvo lugar efectivamente en las instalaciones de mAbxience, el que forma parte del grupo Insud. En tanto, el plan era que el envasado se realice en el laboratorio Liomont de México. Sin embargo, esta no es la primera vez que llega a la Argentina una partida, cuyo envasado fue realizado en la planta del laboratorio AMRI en Albuquerque, en Estados Unidos. Todo se desarrolla en el marco del «proyecto Slim«, una iniciativa financiada por el empresario mexicano Carlos Slim. Ver Press Release AMRI.


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